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“¡Opel is back!” (“¡Opel ha vuelto!”). Estas fueron las palabras que marcaron la primera aparición pública de Karl-Thomas Neumann como CEO de Opel. Fue a principios de marzo de 2013 y ahora, justo un año después, Neumann vuelve a encontrarse donde empezó su camino: en el pabellón 2 del edificio Palexpo. Son las 11 h del día 4 de marzo en Ginebra. La 84ª edición del Salón Internacional del Automóvil ya está en marcha. Y Neumann demuestra que sus palabras se han traducido en hechos.
Neumann pone de relieve que las ofensivas relativas a la marca y a los productos han devuelto a Opel al camino del éxito, y acto seguido presenta varias novedades candentes: por un lado, el mini-crossover ADAM ROCKS y su hermano más deportivo, el ADAM S; por otro lado, el diésel silencioso CDTI 1.6 y el motor turbo de tres cilindros e inyección directa de gasolina. Antes de terminar también anuncia que a partir del próximo año casi todos los modelos en Europa llevarán de serie el servicio de red OnStar. El presidente de GM y también del Consejo de Supervisión de Opel, Dan Ammann, presenta una novedad mundial muy especial: el Astra OPC EXTREME.
Durante el Salón del Automóvil de Ginebra, Opel Post ha acompañado a las personas que hay detrás de los productos y a los responsables de crear un entorno perfecto en la feria. Ahí van cuatro retratos.
EL INVENTOR
De pequeño, Matthias Alt construía coches con bloques de Lego; hoy, este ingeniero de 43 años es el responsable de los motores de gasolina pequeños de Opel. Su último proyecto, el motor turbo de tres cilindros e inyección directa de gasolina, lo ha llevado a cabo con un equipo de más de 200 personas. Desde la culata, pasando por el cigüeñal, hasta el volante: en total había que desarrollar 40 componentes y grupos de componentes. Los ingenieros se dedicaron a la tarea durante tres años y medio. “Dividimos el trabajo en tres fases principales”, explica Alt en Ginebra. “Construcción, pruebas y calibración en el coche”. Alt, que lleva 17 años en Opel, está muy orgulloso del resultado, como lo está también de las numerosas críticas positivas y peticiones de entrevista recibidas durante la feria.
El ingeniero y su motor: Matthias Alt ha desarrollado junto con su equipo de 200 personas el 1.0 Ecotec Turbo de inyección directa con dos niveles de potencia.
“No solo hemos podido reducir el consumo y las emisiones”, explica en relación al motor. “También hemos demostrado que un tres cilindros puede ofrecer la misma suavidad de marcha que los motores con cuatro cilindros o más”. Lo que Alt más valora de su trabajo es que su equipo esté constantemente en contacto con los colegas de todo el Grupo, ya sean de EE. UU. o de Corea. Y además, afirma que “es un placer poder empezar un proyecto como este desde cero y al final poder ver el resultado en funcionamiento tras años de trabajo”.
EL AS DE LOS DEPORTES
Físicamente Niels Loeb se parece al varias veces campeón del mundo de surf, Robbie Naish. Pero además tienen otras dos cosas en común: a ambos les fascina cabalgar sobre las olas. “Sospecho que el Sr. Naish lo domina un poco mejor que yo”, deja caer sonriendo este australiano nacido en Sídney. Y eso tiene que ver con el segundo rasgo que comparten: Naish y Loeb ejercen la profesión de sus sueños. El primero es un surfista profesional, el segundo es el responsable del diseño exterior de los vehículos de Opel. “El rendimiento extra necesario solo lo puedes aportar si tu trabajo es también tu gran pasión”, afirma Loeb que dirigió su primer proyecto en 1997 y diseñó el modelo conceptual del Signum.
El diseñador Niels Loeb y el ADAM S: este miembro de la familia ADAM conquista desde el punto de vista técnico con su chasis deportivo y la dirección mejorada. Los frenos OPC del S se ocupan de que la desaceleración sea como es debido.
El diseñador de 48 años también lo dio todo en el proyecto de la familia ADAM. “El aspecto desenfadado de este coche pequeño se consigue gracias a la existencia de tres líneas”, explica Loeb. “La línea del techo, la línea del larguero inferior y la del tirador de la puerta”. Tal como muestran los comentarios suscitados en Ginebra, el modelo ADAM S destaca por detalles como el faldón delantero con alerón, los largueros laterales y el parachoques trasero con tubo de escape ancho. Comentando el desarrollo del ADAM, Loeb dice que “lo más interesante fue transformar los bocetos en un modelo de plastilina a escala 1:1, y lo más complicado, como es habitual, concretar los detalles al crear el vehículo”. Cuando todo terminó, Loeb se regaló unos días de surf en Cerdeña.
LA GUAPA
Quien hable con Doris Rouesne en el ADAM ROCKS se llevará una sonrisa de anuncio, seguidamente ella levantará el índice y hará una demostración de cómo pulsando un botón se retira el techo de lona Swing Top en solo cinco segundos hasta casi alcanzar el pilar C. Para obtener más información sobre este vehículo de solo 3,74 m de largo, hay que consultar la nota de prensa de Opel o preguntar a uno de los responsables de producto. No obstante, la mayoría de visitantes del stand prefieren dirigirse a Doris Rouesne. “No me explico por qué”, dice riendo esta azafata de 31 años. Tal vez esa misteriosa atracción tenga algo que ver con su apodo: la llaman “la plus belle”, la más bella.
El techo del ADAM ROCKS se abre electrónicamente. Doris Rouesne, azafata de la feria, se pone cómoda en el asiento del conductor.
Esta enfermera de formación dice que llegó al mundo de las modelos por pura casualidad. “Seguramente mis medidas jugaron un papel importante en los castings: 88-61-93”, sospecha Rouesne, originaria de La Martinica. “Van a juego con este cachas tan fardón que me acompaña” comenta guiñando un ojo y señalando el ADAM ROCKS. El chasis levantado 15 mm proporciona más altura sobre el suelo y una mayor sensación de todoterreno. Y es que el musculoso diseño de la carrocería del ADAM abre un nuevo segmento de mercado, el de los mini-crossover urbanos de tres puertas. Y es que el modelo más pequeño comparable con el ROCKS ya es unos 40 cm más largo. Para Doris Rouesne, el ADAM ROCKS “es un coche con temperamento y eso me va. De ahí que no pudiera negarme cuando me llegó la oferta de Opel para estar en Ginebra”.
EL MÁS SOLICITADO
Durante los días del Salón del Automóvil, Jörg Schrott es una de las personas más solicitadas del stand de Opel. Su tarea consiste en facilitar al público datos sobre el Astra más rápido de la historia, el OPC EXTREME. El prototipo es un auténtico imán para los espectadores y causa aglomeraciones. Este hombre del Opel Performance Center admite que le cuesta ser objetivo en relación a este “portento de potencia”. En su vida privada, Schrott conduce un Astra OPC y ha vivido la aparición de la versión EXTREME muy de cerca. El director comercial afirma que el nombre ya lo dice todo. “El coche lleva más de 300 caballos de potencia galopando bajo el capó de fibra de carbono. Esto, efectivamente, es extremo y se traduce en puro placer de conducción”.
Jörg Schrott y el Astra OPC EXTREME: lo que acelera como un rayo también debe poder frenar. Los discos de 370 mm del sistema de seis pistones Brembo deberían cumplir ese cometido sin problemas.
El desarrollo y los ajustes del Astra OPC EXTREME se realizaron en el circuito de carreras más complicado del mundo, el Nordschleife de Nürburgring. Schrott lo explica una y otra vez a los visitantes. Bajo la dirección de Volker Strycek, un equipo formado por unos 20 ingenieros OPC hicieron realidad el proyecto en colaboración con los especialistas de la escudería Kissling Motorsport. Schrott conoce a la perfección el mundo del tuning y la modificación de vehículos Opel. Tras haber trabajado hasta mediados de los noventa como periodista en el mundo de la fórmula uno, empezó a trabajar en Opel en 1997 y formó parte de la primera hornada de especialistas en OPC. “Los proyectos como el EXTREME refuerzan nuestra imagen de marca”, afirma Schrott. “Y eso se percibe claramente en el interés que muestra la gente. Próximamente van a pasar cosas en Opel. En definitiva, es cierto, Opel ha vuelto”.
Ginebra, son las 9 h del 4 de marzo. Después de la noche que ha pasado es impensable, había tanto por hacer que Céline Jann solo ha dormido dos horas, pero ahora está radiante, actúa de forma relajada y delega tareas a sus empleados. “Es la adrenalina” afirma esta mujer de 32 años del equipo de eventos y comunicación de Opel Suiza. “Las ferias son agotadoras, pero geniales”. Jann es la responsable de construir el stand de 1.544 metros cuadrados en el Salón del Automóvil de Ginebra. Lejos de todas las miradas trabajan 66 personas para que la feria transcurra a la perfección. Y a estos hay que añadirles las 16 personas del equipo de limpieza.
El corazón del stand es una pared de 36 metros de ancho que cobra vida gracias a un millón de diodos luminosos.
El toque final para que el espacio sea perfecto lo pone el suelo en negro intenso, él solo ya pesa 44 toneladas. Y fuera de la vista, hay 10 kilómetros de cables. “Preparamos un escenario espectacular para nuestras presentaciones mundiales”, explica Jann.
